Si me lees...
La caneka

Es amorosa como ninguna,
me necesita como el pez al agua
No hace mutis por ella
Ella es así
Su mirada fija siempre sus claridosos
reflejos en las mansas intenciones de
mi deseo.
Constante en sus amoríos
la rechazo frecuentemente.
Sus brazos crean ojos de agua
que pretenden ahogarme de caricias
Su silueta es etérea,  plácida, cálida y fría
al mismo tiempo.
Se retira ante su osadía sin fingir
siquiera dolor o desprecio
tristeza o melancolía.
Es fuerte en su dolor e inapropiada
en su deseo de poseer.
Se va, sintiéndose despojada de mí,
yo se que volverá.
Como el golondrino al nido.
Por mi vendrá y esta vez no podré
negarme a su seductora imagen,
Yo sé que regresará y entonces me
pedirá,  solo como ella lo sabe
que sea por siempre.
Ella, la caneka, me sostendrá y
me llevara a sus aposentos mortuorios.
Entonces seremos felices...
stone