Te espío maravillado,
te persigo en silencio,
tropiezo contigo, y …
a mis excusas respondes
con una sonrisa.
Has pasado tan cerca
que alcanzo a percibir
la brisa de tu olor y …
si no me viste fue por
la altivez en tu modo de andar.
Me trastorna el castañeteo
de tus pasos por el adoquín,
me desordena el corazón el
aire de los suspiros de tu atuendo.
Me vuelvo loco de amor
con los vientos de tu cabello suelto,
el vuelo de tus manos,
el oro de tu risa.
Temo acercarme para no
malograr este encanto
Stone
No hay comentarios:
Publicar un comentario