Y así finalmente volvemos al sempiterno lenguaje
con el que
entre dimes y diretes callamos
lo que claman nuestras almas,
la tuya:
orgullosa, cobarde, indecisa:
la mía: agotada, hastiada, mansa, terca y rebelde.
Y asi regresamos una vez más a hablar con silencios y ausencias,
pausas prolongadas, y nada es dicho y todo se malinterpreta.
Y entonces asi regresamos, de vueltaal vacío de la adivinanza eterna
del misterio que para mi supones,
que para ti soy.
STONE ѱ
No hay comentarios:
Publicar un comentario